El recubrimiento de conversión de óxido es un método de tratamiento de superficies que implica la formación de una fina capa de óxido de aluminio en la superficie del perfil. Esta capa sirve como barrera protectora, evitando una mayor oxidación y corrosión. El proceso de recubrimiento por conversión de óxido implica varios pasos, que incluyen limpieza, grabado químico, enjuague y secado. El espesor de la capa de óxido oscila entre 0,1 y 0,5 µm y puede mejorarse aún más sellando los poros presentes en el revestimiento.
Por otro lado, el anodizado es un método de tratamiento superficial que forma una gruesa capa de óxido de aluminio en la superficie del perfil. El proceso de anodizado implica la oxidación electrolítica de la superficie del aluminio, donde se pasa una corriente eléctrica a través de una solución electrolítica para depositar una capa de óxido de aluminio en la superficie. El espesor del recubrimiento anódico varía de 10 a 25 µm, que es mucho más grueso que el recubrimiento de conversión de óxido. El recubrimiento anódico proporciona una mejor resistencia a la corrosión y al desgaste en comparación con el recubrimiento de conversión de óxido. También sirve como una buena capa de aislamiento eléctrico.
Otra diferencia entre el recubrimiento por conversión de óxido y el anodizado es la apariencia de los recubrimientos. El recubrimiento de conversión de óxido produce un acabado mate y opaco, mientras que el anodizado produce un acabado brillante. La apariencia de los perfiles anodizados suele ser más agradable en comparación con el recubrimiento de conversión de óxido, que puede ser un factor importante en determinadas aplicaciones.
El recubrimiento por conversión de óxido es generalmente menos costoso en comparación con la anodización, ya que el equipo requerido para el recubrimiento por conversión de óxido es relativamente más simple y menos costoso. Además, el recubrimiento por conversión de óxido es un proceso relativamente más rápido en comparación con la anodización. Sin embargo, el anodizado proporciona una mejor resistencia a la corrosión y al desgaste, y también produce una apariencia más atractiva, lo que puede ser crucial en determinadas aplicaciones.
En conclusión, el recubrimiento por conversión de óxido y el anodizado son dos métodos de tratamiento de superficies comúnmente utilizados para perfiles de aleación de aluminio . El recubrimiento de conversión de óxido forma una capa delgada de óxido de aluminio y proporciona una protección básica contra la corrosión, mientras que el anodizado forma una capa gruesa de óxido de aluminio y proporciona una mejor resistencia a la corrosión y al desgaste, así como una apariencia más atractiva. La elección entre los dos métodos depende de los requisitos específicos de la aplicación, incluidos los requisitos de rendimiento y las consideraciones de costos.
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